2) Por
otra parte, haremos unos picatostes. Cortaremos las rebanadas de pan
de hogaza en dados y los freiremos en otra sartén con un buen chorro de AOVE;
cuando queden dorados por todos sus lados, los retiraremos en un plato con
papel absorbente para eliminar el exceso de aceite. Reservamos momentáneamente.
3) A continuación, en una sartén, colaremos el equivalente a un
par de cucharadas del AOVE de freír los picatostes (30 gramos), y lo pondremos a calentar; agregaremos entonces la
harina de trigo, y con unas varillas, la rehogaremos hasta que adquiera un
color dorado.
4) Llegados a ese punto, colaremos la leche infusionada, poco a poco, y con
las varillas, removeremos de forma continuada y sin parar, durante unos 10
minutos a fuego medio (vitrocerámica al 4-5), hasta que espese ligeramente y conseguir
una textura de natillas.
5) Añadiremos el anís dulce, mezclaremos nuevamente con las
varillas, y le daremos un hervor; retiraremos del fuego, pasaremos a un vaso
batidor, y con la túrmix, trituraremos, para eliminar los posibles grumos que
pudieran quedar y llenaremos las copas o
recipientes individuales.
Servimos inmediatamente, acompañamos
con unos picatostes, unos Physalis, y espolvorearemos en última instancia un
poco de canela molida.
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