Ingredientes
(molde circular 23 cm.):
- 1 vaina de vainilla
- 200 gr. chocolate blanco
- 600 gr. queso Mascarpone
- 140 gr.
azúcar moreno
- 4 huevos “L” (240 gr.)
- 50 gr. harina de repostería
*Para la decoración final:
- Fresas
- Natillas de chocolate
- Mermelada de frambuesa
- Azúcar glas
- Canela molida
Preparación
(paciencia 😊):
1) En primer lugar, en un cazo, pondremos a
calentar la nata o crema de leche y la vaina de vainilla (previamente cortada
por la mitad) junto con sus semillas; cuando comience a hervir, lo apartaremos
del fuego, retiraremos la vaina y añadiremos el chocolate blanco troceado. Con
unas varillas, removeremos, hasta que el chocolate se funda y quede integrado completamente.
Reservamos.
2) En un bol, echaremos el queso Mascarpone (a
temperatura ambiente) y el azúcar moreno, con la batidora, batiremos hasta
aunar ingredientes. A continuación,
agregaremos los huevos, de uno en uno; batiremos nuevamente hasta que se hayan
integrado e incorporaremos la mezcla de
chocolate blanco y nata, dejándola caer en forma de hilo, y continuaremos
batiendo a medida que la vayamos agregando. Finalmente
tamizaremos la harina; pondremos a velocidad baja, y batiremos hasta
homogeneizar y conseguir una textura cremosa.
3) Precalentamos el horno a 180º. Engrasaremos el molde
con un poquito de mantequilla y forraremos la basa con papel sulfurizado; echaremos
la mezcla, le daremos unos golpecitos para que se asiente la mezcla e
introduciremos en el horno. Mantendremos en su interior en torno a 45-50
minutos.
4) Cumplido el tiempo de cocción de la tarta,
apagaremos el horno y la dejaremos que se enfríe dentro del mismo durante toda
la noche; con ello, evitaremos que se agriete.
5) Al día siguiente, desmoldaremos la tarta y la introduciremos
en la nevera durante un par de horas para que enfríe bien, antes de degustar.
Cortamos una porción, servimos sobre un plato pincelado
con mermelada de frambuesas, acompañamos con unas natillas de chocolate, decoramos
con unas fresas troceadas y espolvoreamos en última instancia un poco de canela
molida y azúcar glas.
Wasabiconsejo:
En
lugar de una tarta grande, podéis utilizar moldes metálicos más pequeños (9-10
centímetros) y hacer vuestra presentación más original.
Si
queréis la receta de esta deliciosa tarta de chocolate blanco y queso, aquí os
adjunto el enlace de descarga:
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