Ingredientes (4
comensales):
- 6 tomates deshidratados
- 2 dientes de ajo
- Pimentón picante
- Romero
- Tomillo
- ½ vaso de vino blanco
- Aceite de oliva virgen extra (AOVE)
- Sal
- Pimienta negra
*Para las tortitas de boniato:
- 3 boniatos medianos (750 gr.)
- 1 cucharada de harina de trigo (25 gr.)
- 1 huevo “L”
- Sal
- Canela molida
*Para los aros de cebolla:
- 1 cebolla grande
- 1 cucharada y media de harina de trigo
- 1 huevo “L” (60 gr.)
- 75 ml. leche entera
- Aceite de oliva virgen extra (AOVE)
- Sal
- Pimienta negra
*Necesitaremos, además:
- Harina para rebozar
- Pan rallado
Preparación (paciencia 😊):
1) En primer lugar, salpimentaremos los trozos de conejo, los sazonaremos con pimentón
picante y los pasaremos a una fuente de horno. En un vaso batidor, dispondremos
los tomates deshidratados, el diente de ajo, un poco de tomillo y de romero y 100
mililitros de AOVE; con la túrmix, trituraremos, hasta obtener una crema espesa
y la verteremos sobre el conejo troceado. Con la ayuda de una brocha,
repartiremos bien la mezcla; picaremos el otro diente de ajo por la superficie,
cubriremos con papel film e introduciremos en la nevera un par de horas para
que macere.
2) Por otro lado, prepararemos las tortitas de boniato; pelaremos los boniatos, los rallaremos y los pasaremos a un bol, junto con la harina de trigo y el huevo. Pondremos a
punto de sal, echaremos una pizca de canela molida, y con un tenedor, mezclaremos
bien. Reservamos.
3) Precalentamos el horno a 200º. Cumplido el tiempo de
maceración del conejo, lo sacaremos de la nevera y lo meteremos en el horno;
hornearemos por cada lado alrededor de 20-25 minutos.
4) Sobre otra bandeja de horno (previamente forrada con papel
sulfurizado), echaremos un par de cucharadas por tortita; dependiendo del grosor
que le deis, os saldrán en torno a 8-10 unidades. Introduciremos en el horno y
las mantendremos en su interior unos 25 minutos.
5) Mientras se terminan de hacer el conejo y las tortitas, aprovecharemos para hacer los aros de cebolla fritos. En un bol, dispondremos
la harina de trigo, el huevo, la leche y una pizca de sal y pimienta; con la
ayuda de unas varillas, mezclaremos bien hasta obtener una masa ligeramente espesa.
Por otra parte, pelaremos la cebolla, la trocearemos en aros y pasaremos estos
por harina; los sumergiremos en la masa, los rebozaremos en el pan rallado, y acto seguido, los freiremos en una
sartén con abundante AOVE, hasta que queden ligeramente dorados. Retiraremos en un plato con papel absorbente para
eliminar el exceso de aceite.
Servimos el conejo asado, salseamos y acompañamos con las
tortitas de boniato y los aros de cebolla crujientes.
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