- 500 gr. sandía
- ½ pimiento rojo
- ½ pepino
- 1 diente de ajo
- 1 zanahoria
- 4 rebanadas de hogaza de pan
- 150 ml. aceite de oliva virgen extra (AOVE)
- 150 ml. agua fría
- Chorrito de vinagre de manzana
- Sal
- Pimienta negra
*Para la decoración final:
- 8 Mejillones
- 100 gr. queso curado en dados
- 12 cerezas
- Perejil picado
- Aceite de oliva virgen extra (AOVE)
Preparación
(20 minutos):
1) En primer lugar,
escaldaremos los tomates. Para ello, pondremos a calentar una cazuela con agua;
cuando comience a hervir, con un cuchillo le haremos una cruz en el “culo” de
los tomates y los incorporaremos a la cazuela. Los mantendremos alrededor de un
minuto y acto seguido los pasaremos a un bol grande con agua y hielo. Pelaremos
los tomates, le quitaremos los pedúnculos y los dispondremos en un vaso
batidor. Reservamos momentáneamente.
2) Aprovecharemos el agua
de la cazuela, para hervir los huevos. Al estar hirviendo, los añadiremos y
mantendremos en torno a 10 minutos. Sacaremos los huevos y los refrescaremos bajo
un chorro de agua fría para quitarle la cáscara. Los cortaremos por la mitad y
retiraremos la yema del interior. Reservamos.
3) Dispondremos en el vaso
batidor en el que teníamos el tomate, la cebolla troceada en cuartos, los
dientes de ajo pelados, el pimiento troceado, la zanahoria pelada y troceada.
Con la túrmix, trituraremos en primera instancia, colaremos el resultado y
devolveremos al vaso batidor. Agregaremos las rebanadas de pan (que previamente
habremos tenido en remojo durante un par de horas), el AOVE, un buen puñado de
sal y un chorrito de vinagre de manzana. Volveremos a pasar por la túrmix, e
iremos añadiendo agua fría; con un cucharón removeremos hasta obtener una crema
fina y homogénea.
Servimos, decoramos con unos mejillones,
unos dados de queso curado, unas cerezas (previamente deshuesadas), un poquito
de perejil picado y rociamos en última instancia con un chorrito de AOVE.
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