- 750 ml. leche entera
- 4 cucharadas de azúcar blanco
- Cáscara de limón
- 1 vaina de vainilla
- Un chorrito de aguardiente
*Para rebozar las torrijas:
- 150 gr. azúcar blanco
- 2 cucharaditas de canela molida
*Para freír:
- Cáscara de limón
*Necesitaremos, además:
- 2 huevos batidos
*Para la decoración final:
- Salsa de toffee
- Gajos de mandarina "en vivo"
- Canela molida
- Azúcar glas
Preparación
(paciencia 😊):
1) El día anterior,
dispondremos el pan cortado en rebanadas en una bandeja amplia y honda;
cubriremos con un paño de cocina, introduciremos en el horno (debe de estar
apagado) y las dejaremos airear durante toda la noche.
2) Al día siguiente, prepararemos
la infusión de las torrijas, en este caso de leche. En un cazo, pondremos a
calentar la leche entera, junto con el azúcar blanco, la cáscara de limón, la vaina
de vainilla (previamente
cortada por la mitad) junto con sus semillas y un
chorrito de aguardiente.
3) Cuando comience a
hervir, retiraremos del fuego, taparemos y dejaremos atemperar unos minutos. Introduciremos
el cazo en la nevera, y mantendremos en su interior una media hora hasta que la
leche se enfríe totalmente. Llegados a ese punto, la verteremos en la bandeja donde
teníamos las rebanadas de pan, y las dejaremos unos minutos hasta que absorban la leche y queden bien empapadas.
4) En una sartén,
pondremos a calentar el aceite de girasol con un trozo de cáscara de limón. Cuando
el aceite esté caliente, retiraremos la cáscara de limón; pasaremos las
torrijas por huevo batido, las echaremos a la sartén y las freiremos por ambos lados
hasta que queden doradas. Las apartaremos sobre un plato con papel de absorbente
para eliminar el exceso de aceite.
5) Mientras se van atemperando las torrijas, haremos el rebozado. En un plato hondo, echaremos el azúcar blanco junto con la canela molida y removeremos con una cucharilla. En el momento que las torrijas hayan perdido el exceso de aceite (pero aún estén calientes), las rebozaremos por las dos partes.
5) Mientras se van atemperando las torrijas, haremos el rebozado. En un plato hondo, echaremos el azúcar blanco junto con la canela molida y removeremos con una cucharilla. En el momento que las torrijas hayan perdido el exceso de aceite (pero aún estén calientes), las rebozaremos por las dos partes.
Servimos la torrija, salseamos con un poco de salsa de toffee, acompañamos con unos
gajos de mandarina cortados "en vivo" y espolvorearemos en última instancia un poco de canela molida y azúcar glas.
Buen provecho y hasta la próxima =)
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