Ingredientes (4 comensales):
2) Por otra parte, en una sartén, pondremos a calentar el azúcar blanco
y el agua; acto seguido, ubicaremos las fresas en su interior, taparemos y las cocinaremos durante unos 10 minutos a
fuego medio (vitrocerámica al 5-6), removiéndolas de vez en cuando, hasta que queden
confitadas, es decir, ligeramente pochadas.
3) Llegados a ese punto, las apartaremos del fuego y las pasaremos
a un plato con la ayuda de un tenedor; les añadiremos por encima con el jugo
que nos ha quedado en la sartén y las dejaremos atemperar.
4) Mientras tanto, haremos la crema Chantilly. En un bol, incorporaremos la crème
fraîche o nata fresca y con la batidora eléctrica, le daremos un par de pasadas para
aligerarla; añadiremos la nata o crema de leche, poco a poco, junto con las semillas
de la vaina de vainilla, y continuaremos batiendo hasta formar picos suaves pero
firmes.
5) Para el montaje, haremos una primera capa con un par de
cucharadas de crema Chantilly en la base de copas individuales; a continuación,
echaremos un par de cucharadas del jugo de las fresas, cubriremos con una nueva
capa de crema Chantilly, y por último, repartiremos las fresas confitadas.
Servimos, decoramos con unas rodajas de Kumquat, unas uvas
tintas sin hueso y añadiremos en última instancia una cucharada del jugo de
fresa.
Si queréis la receta de estas deliciosas fresas confitadas con crema Chantilly, aquí os adjunto el enlace de descarga:
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